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Alergia a la proteína de la leche de vaca

¿Por qué se produce esta alergia?

La alergia a la proteína de la leche de vaca (APLV) ocurre cuando el sistema inmunológico identifica erróneamente las proteínas de la leche como una amenaza, desencadenando una respuesta inmune. Esta reacción es más frecuente en lactantes y niños pequeños debido a la inmadurez de su sistema digestivo, que permite el paso de proteínas intactas al torrente sanguíneo.

Entre las principales proteínas involucradas están la caseína y las proteínas del suero, que pueden provocar una activación inmunológica anómala. La predisposición genética juega un papel clave en su desarrollo, ya que los niños con antecedentes familiares de alergias tienen un mayor riesgo de presentar APLV.

Alergia Proteína Leche de Vaca Dra Andrea Aguilar

¿Cuál es la sintomatología asociada a la alergia a la proteína de la leche de la vaca?

La alergia a la proteína de la leche de vaca (APLV) puede manifestarse con síntomas en distintos sistemas del cuerpo. A nivel digestivo, es común la presencia de vómitos, diarrea, sangre en las heces, cólicos intensos y rechazo al alimento.

En la piel, pueden aparecer ronchas, eccema o enrojecimiento persistente. A nivel respiratorio, algunos bebés presentan congestión nasal, estornudos, tos o dificultad para respirar. En casos más severos, puede desencadenarse una reacción alérgica grave, como la anafilaxia.

Los síntomas pueden aparecer minutos después del consumo de leche o varias horas e incluso días después. Ante la sospecha de APLV, es fundamental que busques la asistencia necesaria por el bienestar de tu bebé.

¿La alergia a la leche de vaca es lo mismo que la intolerancia a la lactosa?

No, la alergia a la proteína de la leche de vaca (APLV) y la intolerancia a la lactosa son condiciones distintas. La APLV es una reacción del sistema inmunológico contra las proteínas de la leche, lo que puede provocar síntomas digestivos, cutáneos y respiratorios.

En cambio, la intolerancia a la lactosa es un problema digestivo causado por la deficiencia de lactasa, la enzima encargada de descomponer la lactosa (el azúcar de la leche), lo que genera síntomas como hinchazón, gases y diarrea, pero sin activar el sistema inmune. Cada una de estas condiciones se trata de una forma distinta, por eso debe ser diagnosticada con precisión por un especialista. 

¿Qué debemos hacer si sospechamos de APLV?

Si sospechas que tu bebé tiene alergia a la proteína de la leche de vaca (APLV), acude de inmediato a nuestra consulta para una evaluación adecuada, el manejo inapropiado de este u otro diagnóstico puede generar una descompensación grave en el bebé.

Sugeriremos la dieta adecuada para controlar los síntomas, así como las pruebas para determinar el diagnóstico preciso. Un diagnóstico y manejo adecuado ayudarán a evitar deficiencias nutricionales y complicaciones. Solicita una cita aquí

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